Nuevas tecnologías al servicio de la seguridad y contra los robos
En primer lugar, es necesario identificar cuáles son los fallas de seguridad susceptibles de ser explotados por ladrones. La llamada protección «activa» de aberturas: portones, cercas, puertas de entrada, puertas de garaje, ventanas, tragaluces, persianas, etc. – obviamente constituye una prioridad. Es imperativo identificar y reforzar todas las aberturas, sabiendo que la mayoría de los robos se realizan a través de la puerta y las ventanas de la entrada principal.
Las soluciones a considerar son obviamente muy diferentes según la configuración del alojamiento: residencia suburbana, chalet, vivienda unifamiliar o secundaria, de dos plantas, de una sola planta, etc. Con la llegada de las nuevas tecnologías, el modo de protección pasiva ha evolucionado enormemente. Aquellos que no deseen invertir en una alarma pueden recurrir a otro tipo de detectores como la nueva generación de cámaras conectadas que se pueden controlar a través de un teléfono inteligente o una tableta. Alámbricos o inalámbricos, se pueden vender solos o como un kit compuesto por varias cámaras. En este mercado en auge se ofrecen productos cada vez más eficientes.
los soluciones de monitoreo remoto conectados a un centro de control o a la policía ahora tienen que competir con sistemas de alarma conectados tradicionales o menos costosos. Con el fin de simplificar su instalación en el hogar, villa o futuro hogar, la mayoría ahora son inalámbricos. La otra cara de la moneda, consiste en comprobar periódicamente la carga de las pilas y baterías. Para la mayoría de los especialistas en seguridad, estas dos soluciones constituyen la mejor defensa contra las intrusiones.